lunes, 6 de abril de 2015

La chica Criptonita.

Ya ha pasado algún tiempo, la verdad es que no demasiado, pero como mínimo el suficiente. Hoy vengo, para volver a hablar de ti, la chica de las vergüenzas, de los miedos, la chica con vicio a la sala de espera del hospital, mi chica problema, mi chica solución. Nunca fuimos nada, pero lo éramos todo, como si no íbamos a ser capaces de morirnos de risa tras tú decirme que no buscabas nada más.  Nos quisimos, mucho yo diría que incluso demasiado, pero claro desde nuestras diferentes perspectivas, tú me decías que confiabas en mí y yo me prepare para cogerte si caías para atrás, o hacia delante, no fuera a ser que te llegara a decepcionar, aunque, puestos a confesar,  confieso que lo qué de verdad siempre esperaba es que me cayeras encima.

La “chica vergüenzas”, la que me decía que acabaría pensado que eras… bueno ya sabes, tampoco te lo tengo que explicar, y yo que te decía que yo no era de esos, que no lo soy, que nunca lo seré. La “chica de los miedos”, la que me advertía de que tuviera cuidado que hay demasiada lagartona por ahí y que yo era bueno de más, y yo que hacía que no me había enterado muy bien y te dejaba caer eso de que para mí no había más que tú.  La “chica del vicio”, la que me decía eso de que ya no era tan pesimista, que le ayudaba eso que yo le decía en su cabeza cuando se ponía a pensar que todo la iba mal, y yo que hacía como si lo hiciera por ti, cuando era más bien por mí, por ti, porque tuviéramos algo que recordar. Tú que me confesabas tus fantasmas para que los espantáramos juntos aunque nunca fuera de la mano, tú que eras mi criptonita.

Hace ya tiempo que dejamos todo esto atrás, y quizás sea mejor así porque como nos juntemos otra vez la volvemos a liar, pero joder, tampoco lo hacíamos tan mal. Fue solamente que me acorde de ti. Da igual el tiempo que pase siempre serás la “chica criptonita”, mi debilidad, mi chica problema, mi chica solución.


@RubenCalvo8

No hay comentarios:

Publicar un comentario