Había una vez, un niño
al que le pesaban los
pies al andar,
que soñaba con ser
capitán
de sus barcos de papel.
Soñaba con crecer,
con descubrir mil mares
que navegar,
con repartirse su propia
suerte,
con ser su único
crupier.
Este niño le hubo una
vez,
porque ya no está.
Unos dicen que murió,
otros que desapareció,
pero yo os aseguro sin
terminan
de negar la primera ni
la segunda,
que simplemente, me hice
mayor.
Y es entonces, cuando
comprendes
que la vida está hecha
mal,
cuando de pequeño
quieres ser mayor
y de mayor te gustaría
volver a ser pequeño.
Porque yo al contrario
que Peter Pan odiaba la
idea de no crecer.
Y es que os aseguro,
que tras casi 20 años al
timonel
navegando por la vida,
yo también echo de menos
aquellos barquitos de papel.
@RubenCalvo8